Este fenómeno traduce el de la cara acolchada. Se debe a esas caras redondas, deformadas que ninguna de vosotras quiere tener.

Sois muchas, yo incluida, que pensaba que el relleno era como el interior de una funda nórdica. Cuando empecé a ejercer la medicina estética muchas veces mis tratamientos estaban basados más en rellenar que no en tratar.

En ocasiones la paciente no quedaba contenta y tenía razón. Yo tampoco veía unos resultados tan espectaculares como los que me había imaginado.

Incluso en muchas ocasiones regalaba un nuevo vial creyendo que había “desaparecido “o evaporado. Gracias a la colaboración de todos todo esto se ha mejorado.

Por un lado tenemos las casas fabricantes de productos de relleno serias que ya diseñan un relleno para cada zona. Si se trata de ácido hialurónico cada uno tiene una reticulación diferente y por ello debe ser colocado donde toca. Muchas veces por no hacer pagar  dos viales a la paciente cometemos el error de colocarlo en sitios que no tocan. Muchas veces los barato sale caro. En los sitios dónde el tratamiento no es el correcto no se degrada ni se asienta como toca.

La enorme generosidad de todos mis compañeros médicos de estética que han compartido sus conocimientos y técnicas han evitado muchos efectos adversos.

Sin duda imprescindible la ayuda indiscutible y reconocida del Dr. De Cabo creador de la ecografía estética y referente de efectos adversos de la SEME (sociedad española de Medicina Estética)

La ecografía estética nace en Martorell. Nos derivan muchas pacientes con muchos hialurónicos evaporados o inflamados. El contar con alumnos, residentes de dermatología y nuevas generaciones hace que ya podamos hablar de este tema con una gran normalidad. La nueva normalidad.

¿Qué es entonces el efecto pellow o cara de acolchada?

Se debe a la deformidad producida por el exceso de fillers introducidos en la cara. Este exceso sin preservar ni tener en cuenta la respuesta de la persona ni su degradación hacen que la cara se deforme e incluso reaccione.

La imagen de la cara va cogiendo un efecto acolchado como el de una almohada o funda nórdica.

Este efecto todavía se ve más con los gestos, al sonreír o al hablar. Lo peor es que no se v ase mantiene y acrecienta con la edad.

Un exceso de relleno hace que no se adapte al movimiento de los músculos faciales. Esto da un aspecto antinatural.

Cada uno decide lo que quiere hacer. Pero a mí personalmente si me preguntáis que pienso os digo que no lo voy a hacer por varios motivos

El primero es porque no me gusta.

Estoy encantada de ser lo que soy y sólo quiero conservar lo que tengo.

La cara tiene que ir acorde con la edad quiero ser una madre con cara de orgullo, pero no tener una cara recauchutada.

Para no caer en estos errores para mi es importante

  • Valorar el NES ( ecografía estética )
  • Utilizar materiales de relleno de casa reconocidas
  • Mezclar los materiales con la tecnología
  • Ser un buen escultor de la piel
  • Vivir feliz de tus resultados armónicos y naturales

Menos es más. Primero lavar, luego planchar y luego almidonar.

Aprovechar la respuesta natural de nuestra piel puede ser una buena solución para no obtener esas caras deformadas.

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